La nota imposible...

Mozart y Haydn eran grandes amigos y se profesaban una admiración mutua. Una vez Mozart quiso gastar una broma a Haydn y le presento una partitura diciéndole:
Maestro, ¿a que no puede usted tocar esta pieza?
Haydn fue hacia el piano, dispuso la partitura en el atril y empezó a tocar sin problemas. Pero llego un momento en el que se vio obligado a dejar de tocar y dijo a Mozart: No puedo continuar. Has escrito una nota que es imposible de tocar puesto que me faltan dedos.
Esa nota debía tocarse en la parte central del teclado y Haydn tenia ambas manos ocupadas en los extremos. Mozart sonrió y dijo a Haydn:
Déjame a mi. Toco desde el principio y al llegar a la nota problemática agacho la cabeza y la toco con la nariz. Haydn dijo:
Verdaderamente tocáis con toda el alma, pero también con todo el cuerpo.